Se denomina obsolescencia programada u obsolescencia planificada, a la
determinación, la planificación o programación del fin de la vida útil
de un producto o servicio; de modo que, tras un período de tiempo
calculado de antemano, por el fabricante,
durante la fase de diseño de dicho producto, éste se torne
obsoleto, no funcional, inútil o inservible.
En el caso de estos equipos sabemos que por menos de 40 euros podemos
adquirir uno, que sustituir esos cartuchos nos costara más del doble del
importe pagado, por tanto mejor adquirir uno nuevo. Mas sonado fue el caso de Epson, hace años que introdujo en el mercado una impresora con un contador de
páginas que literalmente se bloqueaba al llegar al número programado
para desesperación del usuario.
Si por algún motivo deseáis llevar
vuestra impresora a reparar, en primer lugar os encontrareis con que no
hay servicios técnicos disponibles y en segundo lugar tendréis que
llamar a un teléfono que os dirá que la “tarifa plana” de reparación son
120 euros ¡para que repararla!.
Salvo algunos distribuidores de Canon
que aun reparan estos equipos, no queda mas en el mercado. Lo curioso es
que si te pasan un presupuesto de reparación de un fax o una impresora
antigua y te dicen 150 euros ( lo primero que pensaras es que son unos
ladrones) pero la realidad es que la pieza en cuestión a ellos Canon se
la cobra a 100 €, por tanto la marca sigue controlando el proceso de
obsolescencia y cambio, además nunca te aseguran que tras esa
reparación, halla otra avería.
Otro supuesto de cómo se usa la obsolescencia programada es en los
contratos de mantenimiento; en ellos el usuario final tiene el coste
asegurado, en este caso el problema pasa a ser el SAT, pues este será el
cliente final de la marca del equipo. El primero en introducir este
concepto fue Xerox, pero el primero en meter esta práctica a nivel
usuario fue Canon en su CP 660 donde todos los cartuchos de consumible
incorporaban un chip de contador y que bloqueaban toda la maquina al
llegar el momento prefijado.
En la actualidad Canon sigue incorporando
este chip en todos los cartuchos de tinta de la serie IPF, por poner un
ejemplo.
Ni que decir tiene que tras estas dos marcas, HP por simpatía
con la tecnología Canon, Ricoh, Oki, Kyocera, Toshiba, … siguieron
detrás de ellas.
Como sabemos si sufrimos la obsolescencia programada con una impresora
HP multifunción.
Cuando la impresora le da la gana imprimir, saca una o
dos hojas con calidad perfecta. Pero normalmente no imprime porque
marca error del cartucho de color. Solo quitándolo y
poniéndolo un par de veces me deja imprimir alguna hoja, pero rápido
vuelve a dar el maldito error. O si cada vez que se enciende la impresora nos hace un testeo de cartuchos. Pues lo que pasa es que algunos modelos incluyen incluso un contador de paginas impresas, y llegados al limite programado, dejan de funcionar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario